Habla con confianza
No te sugiero nada amiga mía, pero puedes hablar con confianza Dios no se encuentra aquí presente por el momento. Solo estamos nosotros, es hora de remover las caretas; en el aire se siente que las lluvias se acercan. La gente de sombras largas retorna a su letargo nocturno. Los amantes regresan a su lujuria, los solitarios a sus desdichas en un ciclo vicioso día tras día. Es hora de que este tedio cese. Habla con confianza, grita con cordura, no es necesario que me cuentes tus motivos ni razones, en realidad poco me importan solo borra la mascara que llevas puesta.
Un niño llora en la plaza de la esquina mientras las primeras gotas caen, unos escolares disfrutan del ultimo sorbo de cerveza clandestina entre los árboles. Algunas “jineteras” se preparan para otra noche mas de favores pagados. Todo sigue normal, pero puedes hablar con confianza mientras Dios no regresa.
Ya han pasado horas de lluvia y tu desahogo se escucha cada vez menos, parece un susurro, el sueño domina poco a poco el ambiente, incluso el mal duerme y es muy probable que también tenga pesadillas. Silencio ahí viene… es hora de callar.
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