Síntomas melómanos
Algo en esa canción me hace sentir bien y mal, una idea sin esfuerzo se abre camino entre las espinas de mi mente. Algo me dice que todo eso ya acabó, es demasiado fácil desaparecer o ser olvidado. Entre pasillos blancos ya he aprendido que el infierno es frío.
Nada de eso fue un gran asombro salvo la nostalgia de esa canción, un puñado de (des)conocidos me saluda o me deja de saludar. Ya todo ese tema también me da igual. La cogestión avanza y ya no me excita beber ese ron. Tampoco me excitan esas piernas ni esa falda.
¡Revisen este vaso y este ron que algo anda muy mal!
Mi reflejo sólo me contesta “Déjate de joder”, política conformista pero el conformismo no me es suficiente.
Mejor callar y nunca más escuchar esa canción.
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